Hay diferentes respuestas a la pregunta de cómo llegar a Roma. Claro, porque la capital de Italia puede ser abordada desde diferentes medios de transporte.
Para comenzar, el avión es la opción más usada por los viajeros fuera de Europa o los que aprovechan las compañías low cost. Roma tiene dos aeropuertos internacionales (Fiumicino y Ciampino) con una afluencia de 40 millones de personas al año.
Otra alternativa es el barco, más precisamente a bordo de un crucero. El Puerto de Civitavecchia es quien da la bienvenida a los turistas. También se puede llegar a Roma en tren de alta velocidad desde diversos puntos del continente. La estación principal se llama Termini y tiene servicios a otras urbes italianas.
Por carretera se puede llegar a Roma, ya sea en autobús o en coche. Si bien el estado de la carretera es muy bueno y las vistas son espectaculares, no muchos se deciden por el medio terrestre ya que el boleto es costoso y son bastantes horas de viaje desde otros países.
